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Arturo Villena Aguirre

Retrato de Arturo Villena Aguirre
Arturo Villena Aguirre. Foto: Valery Villena

Arturo Villena Aguirre, abogado, antropólogo y escritor, nació en 1938 en el Cusco. Pasó su infancia en Santo Tomás, Chumbivilcas; estudió la secundaria en Arequipa y Cusco. Durante sus estudios universitarios de derecho en la Universidad San Antonio Abad del Cusco, manifestó un marcado interés por la cultura y la etnología.

Dirigió la revista Liwi durante cerca de diez años, fue director del Club Qorilazo, organizando obras de teatro, presentaciones y lecturas públicas. En 1962 organizó la presentación, sin precedentes, de una nutrida delegación de chumbivilcanos en el Cusco, llamada «Embajada Chumbivilcana«. Así se dio a conocer masivamente la cultura chumbivilcana y la figura del qorilazo en la provincia del Cusco.

Como abogado, ejerció su profesión en Santo Tomás primero, y después en el Cusco, como defensor de oficio en el proceso de Reforma Agraria. Comenzó su trabajo en la Defensa campesina, luego en el Ministerio de Agricultura, y posteriormente ejerció como abogado libre, especializándose en el derecho agrario.

Arturo Villena Aguirre, 1958
Arturo Villena Aguirre, 1958

Su interés por la etnología lo empujó a estudiar antropología en la Universidad San Antonio Abad del Cusco, y durante la preparación de su tesis realizó una larga investigación acerca de las prácticas culturales en Chumbivilcas y la figura del qorilazo. Su tesis se convirtió después en su libro Qorilazo y región de refugio en el contexto andino, presentado en el año 1987. Para esta ocasión, reunió por primera vez a un grupo de músicos chumbivilcanos bajo el nombre de Estudiantina Universitaria Chumbivilcana, agrupación que se ha consolidado con los años, convirtiéndose en una institución reconocida internacionalmente.

Su producción intelectual fue diversa, como escritor publicó la novela En el fin de las fronteras, inspirada en su experiencia como becario Fulbright-Laspau en la ciudad de Austin (Texas, EEUU), escribió cuentos que merecieron menciones honrosas en Perú y España. Fue colaborador en arte y cultura para el diario El Comercio del Cusco.

En el dominio de la sociología y las leyes, publicó una decena de libros sobre sociología jurídica y derecho civil. Fue decano del Colegio de Abogados del Cusco.

Como hombre de izquierda, la defensa y puesta en valor de los derechos y cultura del indio y del campesino fueron su prioridad.

Ejerció la docencia universitaria durante más de 30 años en la Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco y fue abogado independiente hasta el final de su vida. Ambas labores le dieron grandes satisfacciones.